Los préstamos hipotecarios son lo que comúnmente conocemos como hipoteca, y la financiación más importante a la que nos podemos enfrentar por la duración de los plazos de amortización y las consecuencias en caso de impago.
En estos años hemos podido ver cómo cientos de personas han sido desalojadas de sus casa al no poder hacer frente a la cuota del préstamo hipotecario y ser la propia vivienda la garantía del pago.
En algunas ocasiones y gracias a la dación en pago, algunas personas han podido conservar su casa, aunque otras muchas no solo la han perdido sino que han sido incluidas en el fichero de morosos de Asnef, por lo que además les es más difícil conseguir a partir de entonces algún tipo de préstamos con garantía hipotecaria.
Es por estos motivos por lo que es muy importante calcular un préstamo hipotecario y conocer bien qué es y sus requisitos antes de firmar la escritura de la vivienda.
Si nos ceñimos a la definición formal de hipoteca y préstamo tenemos que hablar de sus características, que son obviamente el importe, el plazo de devolución o amortización y la garantía.
Como pasa con cualquier tipo de crédito, se basa en la devolución en un tiempo prefijado de la cantidad establecida junto con el interés del préstamo hipotecario. Pero dado que se trata de cantidades muy elevadas, la diferencia es que son a largo plazo en vez de a corto.
Por eso se vuelve tan importante recurrir a una calculadora de préstamos hipotecarios, ya que cuanto mayor sea la cantidad del préstamo mayores serán los ingresos mensuales que nos exigirá cualquier entidad financiera.
Si hacemos una comparativa de préstamos hipotecarios nos damos cuenta que los plazos de amortización suelen rondar los 30 o 40 años, pero nunca pueden superar la edad de jubilación del que firma el préstamo, ya que se entiende que durante la vida laboral es cuando mayores son los ingresos.
Cuando vamos a pedir un préstamo hipotecario, al tratarse casi siempre de cantidades superiores a los 50.000 euros, es imprescindible calcular la cuota del préstamo hipotecario y sus garantías para que no nos suceda como en los casos mencionados anteriormente.
La práctica habitual es que entre las condiciones del préstamo hipotecario se encuentren que el propio inmueble actúe como garantía en caso de impago de las cuotas, por lo que en este caso se puede llegar a la pérdida de la vivienda pero se mantiene la deuda.
Si hablamos de los gastos del préstamo hipotecario es muy importante que recurramos a un comparador de préstamos hipotecarios para saber cuál será el importe final, ya que no solo será la cantidad asociada al préstamo o hipoteca, sino también todos los gastos asociados.
Los intereses de préstamos hipotecarios van asociados a la cuota o cantidad que solicitamos, pero otros van más relacionados con la formalización de los propios préstamos para hipotecas, como los gastos de notaría o las comisiones por el estudio de la hipoteca.
Tras el estudio del cliente y antes del cálculo de intereses del préstamo hipotecario, la entidad financiera también estudia el inmueble en cuestión. Hablamos sobre todo de la tasación o el valor de la propiedad de cara a establecer el tipo de interés del préstamo hipotecario, pero también de que ésta no tenga cargas ocultas.
Ha venido siendo habitual que los bancos concedieran financiación de hasta un 80% de la valoración del inmueble repercutible en la cuota del préstamo hipotecario, aunque algunas entidades como el BBVA o Bankia han llegado a ofrecer hasta el 100% del valor de la vivienda.
Es por esto por lo que se hace imprescindible mirar ofertas de préstamos hipotecarios antes de firmar con una entidad, que suelen tener acuerdos con inmobiliarias que se dedican a la tasación de los inmuebles.
En este último caso se denomina subrogación hipotecaria o cómo sacar un préstamo hipotecario, que consiste en el traslado de la hipoteca a otra entidad financiera que nos ofrece mejores condiciones como pasa con los préstamos hipotecarios online.
Además de las comisiones, nos encontramos con los gastos hipotecarios relacionados con la formalización del préstamo. Por eso a la hora de realizar el cálculo de la cuota de préstamo hipotecario también tendremos que tener en cuenta los gastos de notaría y gestoría, así como la inscripción en el registro de la propiedad.
Entre los gastos de gestoría encontramos también los relacionados con el pago de impuestos de actos jurídicos documentados correspondiente al 1% del valor del inmueble por el que se ha pedido el préstamo de hipoteca.
Debemos sumar a estos gastos hipotecarios los relacionados con la tasación inmobiliaria, que fija el valor de la garantía y que ayudará a establecer el porcentaje máximo de financiación que tendrá el préstamo hipotecario así como para calcular la cuota mensual del préstamo hipotecario.
Para saber cómo se calcula un préstamo hipotecario, será necesaria por tanto la participación de un arquitecto o ingeniero que realice un informe que certifique la valoración del inmueble con una valoración fiel a los precios del mercado.